martes, 22 de noviembre de 2011

Magnificat.


MAGNIFICAT DE JUAN SEBASTIAN BACH . INICIO.


Cántico de la Virgen ( evangelio . según San Lucas, Cap. 1) , que figura en el oficio de Vísperas. Se caracteriza por una fórmula especial de salmodia. Desde finales de la edad Media se estableció, la costumbre de ejecutar los versículos alternativamente a dos voces, una de las cuales cantaba la melodía litúrgica al unísono y la otra añadía a esta una armonización en fabordón. Desde el siglo XV, un gran número de compositores han tratado el texto del Magnificat , ya sea para uso del culto, por versiculos a varias voces y en los ocho tonos, como lo hicieron entre otros , Orlando de Lassus, Palestrina (1591) y Artus Auxcousteaux, , o bien , en una época más cercana, en forma de cantata religiosa, con solos, coro y orquesta. Deben citarse en este género los Magnificat de Lalande y de Bach, que tenian tantos fragmentos como versículos el texto sagrado, de Lotti y de Durante. Una tradición muy antigua permite que se alternen con los versículos cantados en canto llano, una serie de obras de órgano especialmente compuestos o improvisados a este propósito. Los Magnificat para órgano de Fitelouce (1621) son célebres. Creados sobre los temas de los tonos litúrgicos de la salmodía, su autor los compuso procurando tratarlos a la manera de un motete polifónico vocal, como si las diversas partes pronunciasen las palabras y expresasen el sentido de los versículos, que eran así suplidos por el órgano.. Sus sucesores, a pesar de las prescripciones de la Iglesia, no tuvieron siempre este gusto y este arte. Los Magnificat de Dandrieu, por ejemplo (1740), son una especie de suites que empiezan y acaban con unos llenos majestuosos o brillantes, cuyos diferentes fragmentos están destinados a destacar los diversos recursos del órgano, sin preocuparse del sentido de los versiculos del cántico. Los Magnificat de César Franck, publicados como obra póstuma bajo el título erroneo de L´organiste, constituyen una mezcla singular en la que obras dignas de todo elogio se hallan entremezcladas con verdaderos errores estéticos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario